Carme Poveda, directora de análisis económico de la Cámara, analiza cómo ha impactado en las familias la subida de precios.
La inflación cerró el 2023 con una tasa del 3,1% y la media anual alcanzó el 3,6%. Un nuevo incremento que se suma al registrado en 2022 con un 5,2% y en 2021 con un 6,1%. Una subida de precios que pese a moderarse en los últimos meses ha supuesto una importante pérdida de poder adquisitivo para las familias. En concreto, entre diciembre de 2020 y diciembre de 2023, el IPC ha subido un 16% acumulado. Un aumento considerable que no se ha traducido en los mismos términos entre la población asalariada donde durante el período 2021-2023 los salarios sólo se han incrementado un 8%, la mitad de lo que lo han hecho los precios.
La directora de análisis económico de la Cámara, Carme Poveda, nos describe sus principales consecuencias en un artículo en El Periódico.